La Comisión Independiente de Investigación sobre Siria, creada por el Consejo de Derechos Humanos (REsolución S-17/1), acaba de hacer público un Informe que ha sido presentado en la 21ª sesión del Consejo.
Aquí tenemos al brasileño Pablo Pinheiro, Presidente de la Comisión, presentando las principales conclusiones. Una de ellas es que la cantidad de crímenes internacionales está aumentando de forma dramática en el país.
En el informe se sostiene que las fuerzas del régimen sirio ha cometido asesinatos, realizado detenciones arbitrarias y perpetrado torturas. Además, se afirma su responsabilidad en casos de violencia sexual y violaciones de derechos de los niños.
Pero los crímenes en Siria no son cometidos únicamente por las fuerzas leales al régimen sirio, sino que en el Informe se pone de manifiesto que también hay una responsabilidad de los rebeldes por ejecuciones sumarias, torturas, secuestros. También los rebeldes abusan de los niños, usándolos en distintas áreas en una violación flagrante de sus derechos.
Pinheiro ha anunciado también que en estos momentos la Comisión independiente está en condiciones de facilitar a la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos una lista con los nombres y apellidos de sospechosos de haber cometido estos crímenes.
La investigación de la Comisión continua para, entre otras cosas, aclarar la autoría de otros crímenes cuyos perpetradores permanecen no identificados. Indudablemente, la imposibilidad de acceder a las zonas más afectadas dificulta en gran medida el trabajo de este organismo. Sin embargo, su labor es imprescindible para describir el horror que está padeciendo la población siria en una situación que sigue deteriorándose y que, como también se pone de relieve en el Informe, puede acabar afectando a toda la región. El Consejo de Derechos Humanos ha prorrogado el mandato de la Comisión
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